Acompañamiento e Intervención terapéutica para adolescentes y familias en crisis

Intervención terapéutica familiar en casa

Acompañamiento terapéutico y sistémico para adolescentes y familias en crisis.

Jose Angel Ruiz Perez

Desde el centro terapéutico al hogar de los jovenes y las familias

Acompaño a familias y adolescentes en procesos de cambio, combinando experiencia clínica, enfoque sistémico y coordinación con centros especializados.

¿Qué hace un terapeuta intervencionista?

Acompañamiento en el hogar y trabajo con toda la familia

De la identificación de los problemas en casa

Hasta el ingreso en un centro terapéutico si la situación lo requiere

De la conducta problemática al cambio sostenido

Identificar la conducta problemática

+

Intervenir en el hogar y en la familia

Conseguir un cambio sostenido

Metodología basada en la terapia familiar sistémica

Terapia familiar para adolescentes y jóvenes

Prevención y abordaje de conductas de riesgo en adolescentes

Terapia de padres e hijos para recuperar la convivencia

Terapia para jóvenes con conflictos familiares o emocionales​

Intervención en adicciones y conductas de riesgo

Terapia de adicciones en casa y coordinación con centros especializados

Abordaje integral: familia, escuela y entorno social

Intervencionista en adicciones y especialista en conducta adictiva

Historias de éxito en adicciones y Casos reales

Familias que recuperaron la calma y los límites en casa

Resolución de flictos familiares

Cómo empezar tu proceso de intervención familiar

Preguntas frecuentes sobre terapia e intervención

¿En qué casos se recomienda la intervención familiar en casa?​

La intervención familiar en casa se recomienda cuando la convivencia está deteriorada y la familia siente que ha perdido el control de la situación.
Es especialmente útil si hay:

  • Conductas de riesgo: consumo, fugas, agresividad o conductas desafiantes.

  • Conflictos constantes entre padres e hijos.

  • Falta de límites, normas o acuerdos familiares.

  • Adolescentes que rechazan ir a terapia o no colaboran en procesos tradicionales.

  • Situaciones que requieren un acompañamiento más cercano en el entorno real del joven.

El trabajo en el hogar permite intervenir directamente donde se producen los problemas y generar cambios más rápidos y sostenidos.

Un terapeuta trabaja normalmente en consulta y se centra en el proceso emocional y psicológico del paciente.
Un intervencionista, además de la formación terapéutica, trabaja en el entorno real de la familia, acompañando de manera activa a adolescentes y padres para modificar dinámicas, hábitos y conductas.

La principal diferencia es que el intervencionista:

  • Interviene directamente en casa.

  • Trabaja con toda la familia, no solo con el joven.

  • Actúa sobre las rutinas diarias, los límites y la convivencia.

  • Se coordina con centros educativos, sanitarios o terapéuticos si es necesario.

Es un modelo más práctico, estructurado y orientado a resultados.

Algunas señales claras de que tu hijo puede necesitar ayuda son:

  • Cambios bruscos de comportamiento o humor.

  • Aislamiento, abandono de actividades o rechazo escolar.

  • Mentiras frecuentes, robos o escapadas.

  • Consumo de sustancias, apuestas o uso compulsivo de internet.

  • Agresividad verbal o física en casa.

  • Incapacidad para seguir normas o aceptar límites.

Si estas situaciones se repiten o la familia siente que ha perdido recursos, es importante actuar cuanto antes.
Una intervención temprana evita que el problema avance y facilita una recuperación mucho más rápida.

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